The Clink: Una auténtica prisión medieval

La ciudad de Londres cuenta con ocho prisiones, todas ellas administradas por el HMPS (Her Majesty’s Prison Service) y que alojan a algo más de 7000 reclusos, cifra que se muestra al alza especialmente durante la última década. De entre todos los centros podemos destacar la prisión de Wandsworth, la más grande de todas (con una capacidad cercana a 1700), y que desde su inauguración en 1851, ha dado cobijo a personalidades tan dispares como Oscar Wilde o Pete Doherty.

Es curioso sin embargo observar que, mientras el número de cárceles en Londres no ha variado ni un ápice a lo largo de su historia, ocho en total, lo que sí ha cambiado han sido los nombres y localización de las mismas. Vamos, que en el siglo XXI Londres cuenta con el mismo número de penitenciarias que en el XIII, pero todas las relativas a aquel periodo, o bien se han demolido (como es el caso de la prisión de Fleet), o bien se han convertido en museos o galerías para el disfrute de turistas y visitantes (el mejor ejemplo, la Torre de Londres).

Por eso hoy, quiero viajar hasta Southwark, un distrito al sur del Támesis, y que antaño era conocido por la gran cantidad de actividades al margen de la ley que en él se llevaban a cabo. Sin embargo, lo más destacable (y temido) por aquel entonces en Southwark, no era la elevada tasa de criminalidad, sino una de las peores prisiones que ha conocido la Edad Media londinense: The Clink.

The Clink fue fundada allá por el siglo XII, y se mantuvo activa hasta el año 1780, siendo durante ese periodo una de las más notables en la ciudad de Londres. El nombre de The Clink, que por cierto da nombre a todas las prisiones del mundo a día de hoy en inglés (la traducción sería algo así como el trullo o la trena), proviene del sonido que producían las cadenas de los reclusos al golpearse contra el suelo según caminaban.

Placa colocada en honor a The Clink

Curiosa y paradójicamente, este calabozo se encontraba en una zona de Southwark conocida como The Liberty of The Clink, aunque en este caso el nombre de Liberty no hace alusión a la cárcel sino al hecho de que dicha zona se encontrase bajo el gobierno del Obispo de Winchester, por lo que estaba fuera de la jurisdicción londinense.

The Liberty of the Clink se convirtió pues, y con el paso de los años, en un oscuro agujero donde la prostitución (famoso era el cementerio de prostitutas llamado Cross Bones, y que a día de hoy se encuentra en la calle de RedCross Way), las peleas de animales y cualquier otra actividad delictiva (incluidas las representaciones teatrales, no olvidemos que eran otros tiempos) campaban a sus anchas.

Y muchos de los protagonistas de estas acciones, fueron a dar con sus huesos a The Clink, algo que, os puedo asegurar, no hubierais deseado ni al peor de vuestros enemigos.

Pintura mostrando el interior de The Clink

Aquí, a los hombres se les demacraba y descuartizaba, mientras que las mujeres morían normalmente ahogadas o incineradas en una estaca. Aunque sin duda una de los artilugios más conocidos de aquella época era el conocido como Scold’s Bridle.

El Scold´s Bridle era una especie de máscara de hierro, con un apéndice de unos 5 centímetros y tachonado en su extremo por numerosos clavos. Al colocarse en la cara, dicho apéndice se introducía en la boca del individuo presionando la lengua contra el paladar haciendo imposible el proyectar ningún tipo de palabra. Este castigo se infligía normalmente a las mujeres que se consideraba, hablaban demasiado.

Scold's Bridle

Por suerte para los ingleses e inglesas, estos castigos hace ya tiempo que desaparecieron de su territorio, a la par que las penitenciarias que los llevaban a cabo. Aunque como ya he dicho unas líneas más arriba, algunas se preservaron y, con el tiempo, transformaron en museos.

Es el caso de The Clink, habiéndose convertido en una galería donde se recrean las torturas y condiciones sufridas por los internos de aquella época, y que se puede visitar a diario en su emplazamiento original. De hecho, todavía se conservan algunos de los elementos de la antigua prisión, como puede ser lo que fue el Great Hall con su famosa vidriera. Sin duda una visita que nos transportará al Londres más macabro, al de la Alta Edad Media, y que puede ser una alternativa o complemento perfecto a la que sin duda realizareis o habréis realizado a la Torre de Londres. Además demostrando, una vez más, que hay muchas cosas que hacer fuera de los circuitos habituales.

 Para más información:

 http://www.clink.co.uk/

3 Respuestas a “The Clink: Una auténtica prisión medieval

  1. Suuuuper interesante!!!

  2. Muy buena información! Pero, yo llegué aquí con la finalidad de escontrar algun nombre de alguna Prisión de REino Unido, ¿Sábes una? Si es así, preferencialmente prisión para jóvenes.

Deja un comentario